¿DESESPERANZA?

Esta  palabra acostumbra llenar nuestros noticieros, periódicos, calles y muy a menudo resulta inmiscuirse en nuestras vidas y en la de otros como una epidemia contagiosa que opaca toda posibilidad de tener fe y alegría en un mundo de DESESPERANZA. Hace algunos días mientras me encontraba en Eucaristía fue imposible no detallar algo, el templo se encontraba totalmente lleno lo cual era un evento extraordinario ya que la mayoría del tiempo no se encontraba de esa manera, pensé en la necesidad de Dios en cuan frio y solitario resultaba estar allí afuera y  en cuanta ESPERANZA podrían encontrar allí en aquel lugar a veces tan olvidado y enviado a la mojigatería pero que al final es el único lugar que  es capas de brindar tanta paz en medio de un mundo de odios y guerra en la destrucción de hogares y la amenaza de la extinción completa entre padres he hijos, divorcios, crisis financieras, muerte; sentía una inmensa satisfacción al encontrarme allí pero también pensaba en aquellos que estaban afuera, en cuantas templos vacios habían en el mundo, en la cantidad de corazones desolados que en este momento de debatían entre la vida o la muerte, en los millones de almas enfermas y llenas de sed…necesitadas del amor de Dios.

Las lágrimas de un hombre que lloraba a mi lado lograron conmoverme, podía ver es su rostro el dolor  y la necesidad en la cual se encontraba, muchas cosas pasaron por mi cabeza  como ¿Qué lo hace sentir esa profunda tristeza? ¿Dinero? ¿Familia? ¿Salud? ¿Hijos? ¿Esposa?  Y aunque no lo supe, su  rostro y la devoción con la cual se arrodillo si me permitió comprender que necesitaba algo mas…estoy seguro que Dios lo escucho, que quizás por mas lejano que lo hubiera sentido, El  estaba atento y cercano a su plegaria que entre muchas quizás esta seria la mas sincera porque proviene de lo mas profundo del corazón de ser humano, de uno que se es capas de vaciarse en aquel que lo llena todo y reconocer  cuando débil somos y cuanto necesitamos  de Dios para existir.

Luego al salir de allí puede sentirme satisfecha y tranquila, vi a dos niños jugar  lo cual me pareció el gesto más evidente de la esperanza que aun tiene Dios en la humanidad, allí afuera  donde parece agotarse  día tras día todavía hay  espacio para jugar, amar, creer quizás en las cosas mas pequeñas y mas simples como una plegaria o un simple abrazo; un mundo en espera…eso pensé al salir de la eucaristía, pensé en cuan bueno es Dios al estar ahí siempre para cada uno de nosotros, en que si, la esperanza en ocasiones suele esfumarse pero creo que solo esta esperando para salir con mas fuerza y con mas luz porque es en la desesperanza donde la encontramos a ella como un milagro que viene en busca de nosotros para rescatarnos después de una noche tormentosa y oscura.

Quiero, creer  aun a pesar de los altibajos, deseo amar  de verdad aunque  la mayoría de la población mundial se sienta herida y no quiera volver a hacerlo, quiero soñar  con un lugar mejor aun a pesar de las predicciones que garantizan el fin del mundo y la destrucción de la humanidad, quiero aprender  y enseñar  a  volar entre mundo de personas de pie, deseo que creas ¡QUE  MAÑANA TODO ESTARA MEJOR! ¡QUE JAMAS DEJES DE CREER EN TI! Y QUE A PESAR DE TODOS Y DE NOSOTROS MISMO DIOS JAMAS A PERDIDO NI UN SEGUNDO LA ESPERANZA EN CADA UNO DE NOSOTROS.

La desesperanza está fundada en lo que sabemos, que es nada, y la esperanza sobre lo que ignoramos, que es todo.

CON CARIÑO: ALGUIEN QUE ESCUCHA.